Monumento a las familias fundadoras, inaugurado el 15 de julio de 1952 |
La fundación de Santa Clara se encuentra entre los temas de la historia de la ciudad que mayor divergencia ha presentado en su paso por el tiempo, fundamentalmente en cuatro aspectos: el móvil, el número de familias fundadoras, el lugar y el tamarindo.
Es posible que el tema de la fundación de
la ciudad no haya alcanzado un criterio unánime con respecto a los
cuatro puntos antes mencionados, debido a la existencia de un monumento
perpetuando este hecho, emplazado en un lugar que no es exactamente
donde se reunieron los remedianos para ejecutar dicho acto, además de
que los elementos que lo componen recrean la versión más difundida de la
historia de la fundación de esta ciudad: la publicada en la obra Memoria histórica de la villa de Santa Clara y su jurisdicción
del primer historiador, Manuel Dionisio González,[1], y probablemente
también se deba a que esta versión repetida y reafirmada por más de un
siglo no había sido refutada, hasta que en 1985 aparece publicado en la
revista Islas de la Universidad Central de Las Villas, un ensayo de la
remediana Natalia Raola Ramos, donde plantea algunos puntos no
coincidentes con la historia contada por González, los cuales serán
expuesto en párrafos posteriores.